La ciudad de Cádiz es una de las más recomendables para disfrutar de unos días de vacaciones y turismo. Su oferta de ocio comprende fiestas, cultura y una deliciosa gastronomía, todo ello rodeado del mejor ambiente.
Callejea por sus rincones, llenos de vida, sintiendo la esencia de la ciudad. Te ofrecemos algunas recomendaciones para descubrir los encantos de la ciudad más antigua de Europa.
La ciudad de Cádiz, fundada en el año 1100 a.C. por los fenicios, fue una de las colonias comerciales más importantes de la península, lo que propició que se construyesen, en esa época, los monumentos más importantes de la ciudad como la Catedral, que combina los estilos barroco y neoclásico con gran maestría y que se encuentra a tan solo 10 minutos andando de nuestro establecimiento.
La calidad gastronómica de Cádiz es indiscutible: desde su delicioso pescado, que se consume principalmente como pescaíto frito, pasando por el cazón en adobo o la caballa con piriñaca, hasta sus deliciosos vinos, como el de Jerez. ¡Todo es delicioso!
Podrás degustar todos estos manjares tapeando por la Calle Zorrilla o el Barrio de la Viña, donde te sumergirás en el inconfundible ambiente gaditano y lo disfrutarás en su máximo esplendor.
Uno de los elementos más característicos de Cádiz son sus torres-mirador, construcciones que servían de lugar de recreo y observatorio del tráfico comercial de las flotas que atracaban en el puerto. Estas construcciones muestran la vinculación con la vida y el negocio proveniente del mar y han definido durante 300 años el perfil de la ciudad.
En su cúspide se izaban banderas, mediante las cuales era posible comunicarse con los buques que entraban y salían del puerto. A partir del siglo XVIII, se convirtieron en símbolo de prestigio de los comerciantes, que competían por tener la torre más vistosa y espectacular.
No puedes visitar Cádiz sin descubrir alguna de sus espectaculares playas de arena fina y aguas cristalinas, como La Caleta, situada en pleno casco histórico, u otras como Santa María del Mar, Cortadura y La Victoria, algo más alejadas pero con el mismo encanto.
Un paseo por estas playas te regalará asombrosas puestas de sol, además de impresionantes fotografías de recuerdo.